03 Feb Consecuencias de las últimas sentencias del TS sobre el caso Bankia
El pasado 27 de enero, la Sala de lo Civil del Tribunal Supremo dictó dos Sentencias de enorme relevancia relativas al proceso de adquisición de acciones de BANKIA en la oferta pública de suscripción, que tuvo lugar en julio de 2011.
Ambas resoluciones confirman el criterio aplicado por numerosos Jueces de Primera Instancia, así como por Magistrados de Audiencias Provinciales, quienes han apreciado, de forma clara, un error en el consentimiento prestado por muchos inversores, debido a que la información prestada por la entidad bancaria en la oferta pública de venta resultó incorrecta e inveraz en aspectos relevantes, dando apariencia de una solvencia que no se correspondía con la realidad de su situación financiera, por lo que el consentimiento de los compradores fue nulo, al haber incurrido en un error esencial, por la defectuosa información prestada por BANKIA.
Un motivo de preocupación para muchos inversores que valoraban reclamar judicialmente era, si la existencia de un proceso penal que se tramitaba en la Audiencia Nacional, frente a los miembros del órgano de administración de BANKIA, al tiempo de su salida a bolsa, podía paralizar la reclamación de nulidad en la vía civil. Respecto a esta cuestión no existía un criterio unánime en todas las Audiencias Provinciales de España, sin embargo, en las dos Sentencias dictadas por el alto Tribunal se concluye que no.
En este sentido, las Sentencias crean una doctrina jurisprudencial que vincula a Tribunales de inferior rango, como son los Juzgados de Primera Instancia y las Audiencias Provinciales, por lo que deben servir de auténtico revulsivo para muchos inversores que hasta ahora no se habían atrevido a reclamar por miedo a no ver estimadas sus legítimas pretensiones.
Se espera que en los próximos meses interpongan reclamaciones abundantes inversores.
En lo que se refiere a los grandes inversores institucionales, el Tribunal Supremo determina que dispusieron de vías alternativas al folleto para conocer la situación real de la entidad, por lo que en estos casos resultaría más complicado que la reclamación prosperase.
Por último, todos los inversores que estén valorando interponer la correspondiente reclamación frente a BANKIA es muy importante que tomen una decisión cuanto antes, pues el ejercicio de la acción de nulidad está sujeta a un plazo de caducidad, para cuyo cómputo no existe un criterio unánime
